Los confusos hechos que rodean la investigación y las muertes de los testigos que pudieron esclarecer uno de los crímenes más indignantes para la opinión pública
Durante los últimos 15 años un manto oscuro y difuso ha sido lo que ha rodeado la investigación de los hechos del 13 de agosto de 1999, que derivaron en la muerte del periodista y humorista Jaime Garzón. El crimen que consternó en su momento el ambiente político y de opinión en Colombia, década y media después sigue aún sin esclarecerse, producto de dudosas estrategias para desviar la investigación de un crimen, que indignó a toda la sociedad.
Hay quienes aseguran que el “asesinato de Jaime Garzón fue un crimen de Estado”, tal como lo declaró Alirio Uribe, abogado de la familia Garzón, hace un año al periódico El Espectador de manera contundente, al mismo tiempo que insinuó la existencia de maniobras, cuyo propósito directo es desviar la investigación y de no dirimir el asesinato del periodista.
Esta hipótesis parece tomar fuerza al profundizar en los hechos y, específicamente, en la situación de quienes han sido vinculados a la investigación, así como el lúgubre desenlace de algunos de ellos que, en circunstancias aparentemente sospechosas, han terminado con un destino Fatal.
El funesto final de algunos testigos claves del caso Garzón
Al parecer cada que alguien es involucrado a la investigación y posee datos relevantes para esclarecer el crimen es asesinado y el proceso es desviado de dirección. La primera víctima fue el detective de DAS Juan Simón Quintero Baena, quien por medio de su investigación buscaba sindicar a Alias ʻBochasʼ y ʻToñoʼcomo los presuntos autores materiales del homicidio del humorista, gracias a las declaraciones de Wilson Javier Llano caballero alias ʻel profeʼ. De acuerdo con un informe de inteligencia del DAS del 24 de septiembre de 1999, un mes después del asesinato de Garzón el detective Quintero acompañó a ʻel profeʼen sus primeras declaraciones en contra de los presuntos sicarios que habrían perpetuado el atentado.
Sin embargo, a finales de 1999 Quintero Baena fue asesinado en la ciudad de Medellin, dejando sin argumento la acusación en contra de ʻBochasʼ y ʻToñoʼ, quienes posteriormente fueron desvinculados del caso.
Pero no solo estos hechos vinculaban a estos dos personajes al caso del humorista, Luis Guillermo Velasquez alias ʻmemoʼ,presionado por ʻel profeʼtambién intentó inculpar a ʻToñoʼy ʻBochasʼ del crimen, pero este fue asesinado en sospechosas circunstancias en Medellin el 9 de mayo de 2001 cuando adelantaba reuniones con detectives del DAS.
Por otra parte hay quienes aseguran que el verdadero autor material del crimen de Garzón es alias ʻYiyoʼ, integrante de la oscura banda delincuencial La Terraza, quien habría perpetuado el atentado por órdenes, presuntamente explicitas, del jefe paramilitar Carlos Castaño. ʻYiyoʼ, luego de conocerse las sospechas, fue asesinado en confusos hechos en el departamento de Antioquia seis meses después.
Así mismo varios presuntos delincuentes sometidos a la justicia, buscaron obtener beneficios a través de testimonios vinculados a la investigación del atentado en contra de Garzón, uno de ellos fue el narcotraficante Angel Gaitán Mahecha, quien ofreció testimonio referente al caso, pero también fue asesinado en septiembre de 2001 dentro de la cárcel La Picota de Bogotá.
Igual suerte corrió el guerrillero desmovilizado Robinson Ramírez Peña alias ʻel Chuloʼ,quien en su versión aseguró tener en su poder grabaciones y testimonios que señalaban a los responsables del crimen de Jaime Garzón, sin embargo, antes de presentar las presuntas pruebas ante los entes investigativos fue asesinado el 18 de octubre del 2000 en la cárcel Picaleña de la ciudad de Ibagué.
Estos son algunos de los vinculados al proceso, quienes han encontrado la muerte de diversas maneras y que aseguraron poseer información verídica que hubiese permitido esclarecer el doloroso asesinato de Garzón. Muertes que logran dilatar la investigación y camuflar las verdaderas razones del crimen. Lo cierto es que hoy, 15 años después de este funesto episodio de la historia de Colombia, se teme por la vida de los recién implicados en la investigación, tales como el coronel Jorge Eliécer Plazas Acevedo, quien permanece recluido por razones de seguridad en los calabozos de la Fiscalía y el General (r) Rito Alejo del Río, quien además es recordado por sus presuntos nexos con paramilitares. Estas son las dos piezas claves restantes, con las cuales la Fiscalía pretende, de una vez por todas, establecer los hechos que derivaron en la muerte de uno de los más queridos y recordados humoristas y periodistas de nuestro país.
Jorge Simbaqueba
jorgesimbaqueba@rugidosdisidentes.co
Imagen principal tomada de internet: http://es.wikipedia.org/wiki/Jaime_Garz%C3%B3n