(Santa Marta, Magdalena, Colombia)
Por, Olugna
La noche se consume con cada bocanada de humo. Cigarrillo tras cigarrillo, absorbe esa ciudad que deambula en la oscuridad. Es fácil suponer que, al igual que sus pasos desprevenidos atraviesan las calles, sus pensamientos ―quizás― desorientados, se pasean por su cabeza. Las luces delirantes de una urbe nocturna, anticipan que, en unas cuantas horas, llegará el amanecer; sus emociones internas, que divagan en su interior, le anuncian que mañana será otro día.
El video lyric de ‘SMS’, lanzamiento que presenta Overlay the Peace, artista nacido en Santa Marta, narra desde la estética que ofrece la noche en la capital del departamento de Magdalena, la transición emocional de un individuo que es enfrentado por la realidad, que es encarado por la dureza de la vida. Por suerte, el protagonista de esta historia, tiene a su alcance la tranquilidad del océano; por suerte, la transición que atraviesa, le habrá de enseñar que siempre hay otra oportunidad.
―Tengo la fortuna de vivir frente al mar. ―Explica Overlay the Peace y agrega―. Siempre inspirado por la playa y sus atardeceres.
Los destellos de las luces nocturnas, se combinan con los sonidos electrónicos y brillantes de los sintetizadores. ‘SMS’, a través de sus diversos elementos musicales y visuales, toma la noche como escenario y las sensaciones interiores, como el argumento de un relato que todos hemos vivido, pero cuyo final puede ser incierto.
No obstante, la canción escrita por Overley Cuesta, el hombre detrás del proyecto de música alternativa, explora otras sonoridades y busca crear otras experiencias a través de la combinación de otras posibilidades. Es una composición que se desplaza, por momentos, por las atmósferas del pop, para dirigirse de manera tímida hacia los sonidos del indie rock.
La letra de ‘SMS’, aunque más íntima, narra un episodio común en la vida de toda persona y plantea una pregunta honesta, necesaria y ―para algunos― incómoda: «¿Por qué estoy viendo todo mal?», para buscar la respuesta en sus líneas posteriores. Es una balada que recorre atmósferas tranquilas, pero que esconde en su lírica, pensamientos angustiantes; es una canción reflexiva que evita la compasión y sacude, a su manera, la cabeza de quien encuentra identificación en ella.
Sin embargo, más allá del conflicto interior que puede interpretarse en ‘SMS’, el lanzamiento del solista samario, no cae en el pesimismo y deja un final abierto a partir de una frase sencilla y ―al mismo tiempo―, definitiva: «Ahora pienso en mí, lejos de fallar».
―Siento este tema como una invitación a enfocarnos en nosotros mismos y en ser una mejor versión de nosotros―, agrega el artista.
El extenso segmento instrumental, que inicia pasados los tres minutos y se extiende hasta el final de la canción, permeado igualmente por los sonidos electrónicos, otorga un escenario de calma y trasmite una sensación tranquilizadora y de soledad, que cierra con acordes delicados que indican que en Overlay the Peace, la influencia del rock, aunque no tan evidente, deja sentir su presencia.
‘SMS’, sin ser progresiva, recrea atmósferas dinámicas, sugiere leves cambios de ritmo y deja al descubierto la premisa de Overlay The Peace por explorar y fusionar diferentes expresiones musicales que son acompañadas por el lenguaje audiovisual.
Al igual que la canción, la escena final en el video lyric, desemboca en un escenario de paz y tranquilidad; en esta ocasión, en la playa, bajo el cielo de la madrugada.
―Me gusta hablar de las cosas que nos ocurren y de lo importante que es seguir intentando hacer lo que nos apasiona―. Finaliza.
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