(Bogotá D.C., Colombia)
Por, Andrés Angulo Linares
Ante la fuerza de las armas, muchas veces disparadas por aquellos que han jurado defender al pueblo; la música, en este caso el rock/punk, termina siendo la respuesta. Una voz popular que se alza desde los barrios para gritar: “Y en tu cara te quiero decir, que algún día te vas a joder”.
De un criminal se espera lo peor, se quiera o no, su decisión fue la de romper sueños, callar voces contradictoras y cegar vidas. De un héroe, esa construcción que dota a un individuo de poderes excepcionales, se espera todo lo contrario, de él solo es posible la imagen de aquel que está dispuesto a entregar su vida por defender la del otro.
Sin embargo, en Colombia, criminales y “héroes”, comen del mismo plato y se abrazan mientras todo a su alrededor se hace añicos gracias a sus “proezas”. Ante esta ignominia, la respuesta descarada de un sector de la sociedad ha sido la de arrodillarse y rendirle culto al victimario.
Son Falsos Héroes, expresión que Blast55 usó para titular su más reciente lanzamiento, demostrando de esta manera, que definitivamente, el rock es un acto político.
Un video que inicia con suave silbido, acompañado por una ligera intervención de los instrumentos, cuyo sonido aumenta en potencia, mientras da paso a un fragmento de las tantas reflexiones que Jaime Garzón inmortalizó en sus discursos: “Nosotros nombramos funcionarios públicos, funcionarios públicos pa’ que le funcione al público y terminamos haciéndole venia, es decir, todo sirviéndole a ellos. ¡En un absurdo!”, para luego descargar la fuerza propia del punk/rock y el hardcore.
—En el interludio de la canción conmemoramos algunas de las víctimas de los excesos de la autoridad, pues la fuerza pública, al igual que los gobernantes, son funcionarios al servicio del país y bajo ninguna circunstancia podemos permitir que sus acciones atenten contra la vida de los ciudadanos. Dichas acciones han generado que instituciones como la Policía sean vistas en la actualidad con terror y miedo en vez de generarnos seguridad —explica Juan Pablo Patiño, vocalista de Blast55.
Ráfagas de imágenes en blanco, negro y rojo, de protestas alternadas con escenas de Blast55 en estudio, terminan de darle concepto a la pieza audiovisual de Falsos Héroes, una canción que pone en cuestión temas que deberían formar parte del debate social que se pretende desde los sectores que procuran un cambio.
—Actos como que en un país en donde el fiscal anti corrupción está preso por corrupto y un embajador tiene un proceso de extinción de dominio por tener un laboratorio de cocaína en su finca, nos llevan a alzar la voz para denunciar y expresar nuestro inconformismo desde el arte —expresa Juan Pablo.
La trayectoria de Blast55 completa un poco más de dos décadas, en las cuales ha logrado posicionarse como referente en el amplio público del movimiento rockero del país. Más de 20 años en los que la agrupación ha acumulado experiencias en importantes escenarios y ha adquirido la madurez que le ha permitido mantenerse vigente.
- Un poco más de la historia de Blast55 en el podcast de los amigos de Colectivo Sonoro.
—Nuestras letras hablan de la cotidianidad, por eso el amor, la amistad y nuestro entorno están implícitos en nuestras canciones —agrega el cantante—; pero también vivimos en Colombia, un país en donde la violencia hace parte del día a día, una violencia que se alimenta de muchos factores, entre ellos, la corrupción y el narcotráfico.
Falsos Héroes representa el cierre de un año de mucho trabajo para Blast55, que próximamente dará a conocer el EP 20/20, del cual forma parte este lanzamiento.
La canción finaliza con otras de las reflexiones más sentidas de Jaime Garzón:
Nadie podrá llevar por encima de su corazón a nadie, ni hacerle mal a su persona, aunque piense y diga diferente. Con este artículo que nos aprendamos, salvamos este país”
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