Al regresar al pueblo,
al pisar la tierra amada,
se aprisiona el pecho,
se inunda el alma.
Así es como te veo
fértil, fuerte y añorada,
así es como te siento
cálida, apacible y honrada.
Aquel humilde sembrador,
es tu pieza más preciada,
como el que construye sueños…
como el que da esperanza.
Puedo cerrar los ojos
y pensar en tu grandeza,
en tus imponentes brazos,
cubriendo todas estas tierras.
No deseo besar otro suelo,
no quiero irme de aquí,
donde forjé mis raíces,
donde me enseñaste a vivir.
Julieth Corredor
Nacida en Duitama- Boyacá egresada de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, docente, amante de la poesía, del drama y el romance por convertirse en mis invaluables herramientas de expresión.
Recuerda que Narraciones Transeúntes es una convocatoria permanente, participa con tu texto y revisa los requisitos en:
Narrraciones Transeúntes
Imagen tomada del sitio: fotorecurso.com
Comentarios